EL VARICOCELE SE PUEDE DEFiNIR COMO LA HINCHAZÓN E NFLAMACIÓN DE LAS VENAS QUE LLEVAN SANGRE A LOS TESTÍCULOS, DE FORMA QUE ESTAS SE VUELVEN AGRANDADAS Y RETORCIDAS EN EL ESCROTO, A CAUSA DE UN MAL FUNCIONAMIENTO DE LAS VÁLVULAS DENTRO DE LAS VENAS DEL CORDÓN ESPERMÁTICO, O SEA QUE IMPIDE QUE LA SANGRE FLUYA APROPIADAMENTE. LA DILATACION DE ESTAS VENAS SE TRADUCE EN UN AUMENTO DE LA TEMPERATURA TESTICULAR QUE DE MANTENERSE POR UN TIEMPO MUY PROLONGADO, PUEDE ALTERAR LAS CONDICIONES PARA EL CRECIMIENTO Y LA MADURACION DE LOS ESPERMATOZOIDES SANOS Y SU CAPACIDAD PARA FECUNDAR. POR ESTAS RAZONES, EL VARICOCELE CONDUCE A UNA DE LAS PRINCIPALES CAUSAS DE INFERTILIDAD MASCULINA.
El Varicocele es un proceso benigno, caracterizado por la dilatación de las pequeñas venas que rodean el testículo, conocidas como várices escrotales. La vena espermática, proviene del testículo y realiza un recorrido ascendente vertical. Por un lado, la vena espermática izquierda, desemboca en la vena renal del mismo lado, mientras que la vena espermática derecha, desemboca en la cava. El recorrido en el lado izquierdo es más largo que en el derecho, razón por la cual es más común el varicocele del lado izquierdo que en el derecho, aunque puede ser bilateral. A pesar de no ser un padecimiento de grandes complicaciones, si se convierte en la causa de infertilidad masculina en el 40 % de los hombres.
En la mayoría de los casos, el Varicocele se desarrolla lentamente. Su aparición es más común entre varones de 15 a 20 años, y como se mencionaba anteriormente se observa con mayor frecuencia en el lado izquierdo. En una persona con edad avanzada, la aparición del Varicocele, pudiera estar asociado a un tumor renal que bloquearía el flujo sanguíneo. Las causas que provocan esta enfermedad pueden ser variadas, desde incompetencia venosa, hasta masas compresivas abdominales cercanas a la desembocadura de las venas.
Síntomas: el síntoma más importante es el dolor. Este puede presentarse en episodios de dolor muy agudos, reflejados hacia la fosa inguinal correspondiente. El dolor asociado al Varicocele, va en aumento lentamente a través de los años.
Los pacientes con Varicocele pueden experimentar:
- Dolor. La intensidad del dolor puede variar entre un dolor agudo y una molestia breve.
- El dolor aumenta al estar de pie o al realizar esfuerzos físicos, durante períodos de tiempo prolongados.
- Las molestias empeoran durante el transcurso del día.
- El dolor suele disminuir al acostarse boca arriba.
- Causa infertilidad.
No existen diferencias de varicocele, pues todos tienen la misma base. Puede ser derecho o izquierdo, y puede tener diferentes grados en función a la evidencia clínica del varicocele.
Los distintos grados son:
- Grado 0: solo se detecta mediante ecografía
- Grado 1: se hace palpable con maniobras de Valsalva (aumento de la presión abdominal)
- Grado 2: es palpable sin la maniobra de Valsalva
- Grado 3: es claramente visible en escroto.
El varicocele puede causar las siguientes complicaciones:
- Atrofia del testículo afectado: el grueso del testículo, está compuesto por túbulos que producen esperma. Cuando se daña, por ejemplo por varicocele, el testículo se encoge y ablanda.
- Esterilidad: el varicocele podría mantener la temperatura local dentro o alrededor del testículo demasiado alta, lo cual afecta la formación, el movimiento y el funcionamiento del esperma.
El diagnóstico se hace mediante exploración física en consulta y con el paciente en posición acostada. La confirmación se hará mediante Doppler del escroto, con el cual se verán con claridad las venas varicosas peritesticulares. Además se realizaran exámenes complementarios como espermograma, espermatograma o seminograma. Aunque el espermograma no es una prueba diagnóstica del varicocele, si pueden evaluarse las consecuencias que este puede provocar.
El Varicocele tiene tratamiento, pero no siempre que se detecte hay que tratarlo. Muchos hombres que padecen de Varicocele pueden tener hijos sin realizar ningún tratamiento. Sin embargo, si el paciente experimenta dolor, atrofia testicular o esterilidad, si debe considerar técnicas para la reparación del Varicolcele. Su tratamiento es quirúrgico y consiste en ocluir la vena espermática para que no exista comunicación entre su porción superior y el escroto, de esa forma disminuye la presión en el escroto inferior. Esta cirugía se nombra varicocelectomía y entra en el campo de la urología. Puede hacerse con anestesia local y dura poco tiempo. La herida es pequeña y causa muy pocas molestias, puede hacerse a través del abdomen o inguinal. La recuperación es rápida y no impide hacer la vida de forma normal pasado el tiempo de recuperación. Cuando la operación es ambulatoria, el paciente regresa a su casa en el día. El éxito depende mucho de la disciplina del paciente con que cumpla con el reposo orientado por su médico.
Las complicaciones son muy raras, pero como cualquier intervención quirúrgica supone riesgos, entre ellos: hemorragia escrotal, infecciones o sepsis, hidrocele al cabo del tiempo de realizada la cirugía, formación de coágulos o ruptura de vasos sanguíneos y lesión en la arteria testicular. Tras la intervención, se realizará consulta de seguimiento. Los avances médicos han llevado a una disminución de las complicaciones posquirúrgicas. Un avance es el uso del microscopio quirúrgico durante la cirugía, lo que le permite una mejor visión al cirujano. Si un adolescente presenta atrofia testicular progresiva es necesario consultar de inmediato a un especialista para evaluar la necesidad de intervención quirúrgica.
Aunque la presencia del Varicocele es bastante frecuente, no existen factores de riesgo asociados. La base en un defecto anatómico que permite que la presión de la columna de sangre se trasmita hacia el escroto. Existe un prevalencia en hombres altos y delgados. Es importante señalar que la presencia de varicocele no está asociada al desarrollo futuro de tumores testiculares.
En resumen el Varicocele es la causa más frecuente de esterilidad en los hombres. Implica un riesgo para la fertilidad y suele ser progresivo, con deterioro paulatino de la función testicular. El varicocele clínico es aquel que puede detectarse con la simple exploración física, mientras que el subclínico se define como el reflujo a través de la vena espermática interna, sin un agrandamiento palpable del plexo pampiniforme y este es solo demostrable con el uso de procedimientos diagnósticos. Se recomienda si presenta algún síntoma, acudir al especialista para recibir toda la información necesaria, así como una atención personalizada. CHMT cuenta con un equipo de profesionales altamente calificados que pueden ayudarle.