LA PERDIDA AUDITIVA O HIPOACUSIA SE DEFINE COMO CIERTO NIVEL DE REDUCCION DE LA CAPACIDAD AUDITVA EN UNO O AMBOS OIDOS. LA PERDIDA DE AUDICION PUEDE SER A TRAVES DEL TIEMPO O SUBITA. SUS CAUSAS PUEDEN SER MULTIPLES (EDAD, RUIDO, ENFERMEDADES INFECCIOSAS, TUMORES, ENTRE OTROS) Y PUEDEN AFECTAR DIFERENTES PARTES DE LA VIA AUDITIVA, SE CLASIFICA COMO DE CONDUCCION, NEUROSENSORIAL O MIXTA, EN FUNCION DE LA PARTE DE LA VIA QUE RESULTE AFECTADA.
La mayoría de los casos de pérdida auditiva se desarrollan de forma gradual, así que los síntomas suelen ser difíciles de reconocer. Sin embargo el factor común principal a tener en cuenta es la reducción de la intensidad de la audición.
La pérdida de audición se diagnostica mediante una prueba de audición que consiste en una serie de pruebas que determinan el nivel de la pérdida de audición y hasta qué punto. Esta prueba es realizada por un especialista con equipos profesionales. Entre las pruebas que se realizan para diagnosticar la pérdida de audición están:
- Exploración física: el especialista buscara mediante la exploración física problemas estructurales en el oído, así como una inflamación o presencia de cerumen.
- Análisis para detección generales: se conoce como la prueba del susurro, el especialista le pide al paciente que tape uno de los dos oídos y hablará en distintos volúmenes.
- Prueba con diapasón: el diapasón es un instrumento metálico en forma de horquilla que produce sonidos cuando lo golpea. Esta prueba ayuda a revelar en que parte del oído ha ocurrido el daño.
- Pruebas con audiómetro: al paciente se le colocan auriculares y escucha palabras o sonidos, que se repiten a niveles bajos para saber cuáles son los sonidos más tenues que logra escuchar.
- La prueba de Rinne: compara la manera en que el paciente oye los sonidos conducidos por el aire y la manera en que oye los sonidos conducidos por los huesos del cráneo.
Las categorías más comunes dentro de las clasificaciones de pérdida auditiva son: pérdida auditiva leve, moderada, severa y profunda.
Existen tres tipos de pérdida auditiva:
- Pérdida auditiva de conducción: ocurre cuando algo bloquea la llegada del sonido a las estructuras sensoriales del oído interno. El problema puede afectar al conducto auditivo externo, al tímpano o al oído medio.
- Pérdida auditiva neurosensorial: ocurre cuando el sonido llega al oído interno, pero no puede traducirse en impulsos nerviosos (pérdida sensorial) o bien los impulsos nerviosos no son transportados al cerebro (pérdida neural).
- Pérdida auditiva mixta: es una combinación de conducción y sensorial. Puede estar causada por un traumatismo craneoencefálico grave, una infección crónica o algún trastorno genético.
Tanto el envejecimiento como la exposición crónica a los ruidos fuertes contribuyen a la pérdida auditiva. Entre las causas de la pérdida auditiva están:
- Acumulación de cerumen
- Ruido
- Envejecimiento
- Infecciones en el oído
Causas menos frecuentes pero que se deben tener en cuenta:
- Trastornos autoinmunitarios
- Trastornos congénitos
- Medicamentos ototóxicos (son fármacos que dañan el oído)
- Lesiones
- Tumores
Los signos y síntomas de la pérdida de audición pueden ser los siguientes:
- Dificultad para comprender palabras, en especial, cuando hay ruido de fondo o en medio de una multitud de personas.
- Dificultad para escuchas los sonidos consonánticos
- Necesidad de subir el volumen del televisor o el radio
- Abstenerse de participar en conversaciones
- Evitar entornos sociales
El oído consta de tres partes principales: el oído externo, el oído medio y el oído interno. Las ondas sonoras pasan a través del oído externo y causan vibraciones en el tímpano. Este y tres pequeños huesos del oído medio amplifican las vibraciones que llegan al oído interno. Allí las vibraciones pasan a través del fluido en una estructura con forma de caracol del oído interno (cóclea). En las neuronas de la cóclea, hay miles de vellos pequeños que ayudan a traducir las vibraciones sonoras en señales eléctricas que se tramiten al cerebro, y este las convierte en sonido.
La pérdida de audición tiene un impacto significativo en la calidad de vida del paciente. En el caso de los adultos mayores pueden desarrollar depresión profunda, debido a que se ven limitados de expresar sus pensamientos y en algunos casos llegan incluso a experimentar sentimientos de aislamiento. El mecanismo de interacción entre la pérdida de audición, el deterioro cognitivo, la depresión y el aislamiento es algo a tener en cuenta, pues tratar la pérdida de audición tiene un efecto positivo en el desarrollo cognitivo, especialmente en la memoria.
Prevención:
- Protegerse las orejas limitar la duración y la intensidad de la exposición al ruido.
- Controlar la audición: en caso de presentar algún factor de riesgo, se recomienda realizarse pruebas periódicas de audición.
- Evitar riesgos: existen actividades que con el tiempo pueden incidir de manera negativa en el oído, por ejemplo: usar herramientas eléctricas, escuchar música como el rock con un volumen elevado, prácticas de tiro sin usar tapones para los oídos, entre otras.
El tratamiento depende de la causa y la intensidad de la pérdida auditiva. En ocasiones la pérdida de audición es temporal ( a partir de una gripe, sinusitis o incluso alergias) y puede mejorar por sí misma. Sin embargo es muy importante acudir al médico si los síntomas persisten para evaluar otros procedimientos , unos más simples como la extracción del tapón de cera, o a la incorporación de audífonos que amplifican el sonido y lo dirige hacia el interior del conducto auditivo; y otros procedimientos más complejos que incluyen la cirugía y los implantes cocleares. El implante coclear estimula directamente el nervio auditivo.
Entre los signos de alarma que se deben tomar en cuenta para acudir al médico están:
- Pérdida de audición en un solo oído.
- Dificultad para hablar, entumecimiento de la cara
- Mareos o pérdida del equilibrio
- Zumbidos en el oído
- Secreción en el oído
- Vértigo
La pérdida auditiva es más común de lo que pudiera pensarse, muchos son los factores que pudieran provocarla, por eso es tan importante si presenta signos, acudir al especialista pues mejora las posibilidades de encontrar un tratamiento exitoso.
Cuba cuenta con un enfoque multidisciplinario, interinstitucional e intersectorial para el tratamiento de la pérdida auditiva sobre todo en niños. Los implantes cocleares son una realidad en Cuba para todos los niños que padecen una hipoacusia sensorial bilateral ya sea severa o profunda. Con gran prestigio a nivel internacional, los especialistas disponen de la tecnología más avanzada para realizar los implantes además de la rehabilitación y habilitación para la vida futura del paciente.