EL CÁNCER DE VEJIGA SUELE SER UN CARCINOMA DE CÉLULAS TRANSICIONALES (UROTELIALES). LOS PACIENTES PRESENTAN POR LO GENERAL HEMATURIA O SÍNTOMAS DE IRRITACION EN LA MICCIÓN, COMO POLAQUIURIA O URGENCIAS; MÁS TARDE LA OBSTRUCCION URINARIA PUEDE CAUSAR DOLOR. EL TRATAMIENTO SE REALIZA CON FULGURACION, RESECCIÓN TRANSURETRAL, INSTILACIONES INTRAVESICALES, CIRUGÍA RADICAL, QUIMIOTERAPIA, RADIOTERAPIA EXTERNA O UNA COMBINACIÓN DE ELLAS.
La vejiga es un órgano hueco, expansible en la parte inferior del abdomen donde se almacena la orina. Esta función hace que la vejiga sea una parte muy importante de las vías urinarias, que también están compuestas por los riñones, los uréteres y la uretra. Este órgano tiene paredes musculares flexibles que se estiran para almacenar la orina y se contraen para expulsarla del cuerpo. La principal función de la vejiga es almacenar la orina. El cáncer de vejiga ocurre en la membrana interna de la vejiga, cuando las células comienzan a crecer en forma descontrolada. Conforme se desarrollan más células cancerosas, estas pueden formar un tumor.
La mayoría de los pacientes consultan al especialista por hematuria no explicable. En ocasiones puede presentar anemia y síntomas irritativos en la micción como son: ardor, disuria (dolor al orinar) y polaquiuria. Cuando aparece el dolor pelviano, por lo general el estadio del cáncer ya es avanzado.
El diagnóstico se realiza a través de una cistoscopia con biopsia o una citología de la orina o ambas. El cáncer de vejiga se sospecha por el cuadro clínico que presenta el paciente. A través del estudio citológico de la orina, se detecta células malignas.
Existen tres tipos de cáncer de vejiga que comienzan en las células que revisten el interior dela vejiga:
- Carcinoma de células de transición: cáncer que se forma en células de la capa de tejido más interna de la vejiga. Este carcinoma puede ser de grado alto o de grado bajo.
- Carcinoma de células escamosas: cáncer que comienza en las células delgadas y planas que revisten el interior de la vejiga-
- Adenocarcinoma: comienza en las células glandulares en el revestimiento de la vejiga.
Otras formas de describir el cáncer de vejiga, además del tipo de células , sería como no invasivo, no músculo invasivo o músculo invasivo:
- No invasivo: incluye el carcinoma papilar no invasivo y el carcinoma in situ.
- No músculo invasivo: este crece típicamente solo en la lámina propia y no en el músculo.
- Músculo invasivo: crece en el músculo de la pared crece en el músculo de la vejiga y algunas veces en las capas de grasa que circundan al tejido fuera de la vejiga.
Los canceres superficiales de vejiga pueden extirparse completamente mediante ka resección transuretral. Para el carcinoma in situ y otros carcinomas de células transicionales superficiales de alto grado se utilizan otros tratamientos inmunoterapéuticos, después de la resección transuretral.
Los tumores que invaden el músculo, por lo general requieren una cistectomía radical. La derivación urinaria tradicional posterior ala cistectomía implca enviar la orina a través de un conducto ileal hasta un estoma abdominal y recogerla en una bolsa de drenaje externa. Los protocolos de preservación de la vejiga que combinan quimioterapia y radioterapia pueden ser indicados en pacientes de edad avanzada en los cuales una cirugía sería muy invasivo y agresivo.
La mayoría de los cánceres de vejiga se diagnostican en etapa inicial. Este factor incide de forma positiva en encontrar un tratamiento altamente efectivo. Los síntomas y signos principales a tener en cuenta son los siguientes:
- Hematuria (sangre en la orina). Esta puede aparecer a simple vista o a través de un análisis de laboratorio.
- Sensación de tener que orinar inmediatamente, incluso con la vejiga vacía.
- Micción frecuente
- Micción dolorosa
- Dolor en la espalda
Los síntomas de cáncer de vejiga avanzado pueden causar:
- Imposibilidad de orinar
- Pérdida de peso y apetito
- Cansancio o debilidad
- Inflamación de los pies
- Dolor en los huesos
- Dolor en la zona baja de la espalda
Factores de riesgo que pueden aumentar la incidencia de la aparición del cáncer de vejiga:
- Tabaquismo: esta sustancia química nociva puede dañar el revestimiento de la vejiga.
- Edad: con la edad el riesgo aumenta.
- Sexo: los hombres son más propensos a padecer cáncer de vejiga que las mujeres.
- Exposición a ciertas sustancias químicas: los riñones tienen un papel fundamental en filtrar sustancias químicas nocivas del torrente sanguíneo y trasladarlas a la vejiga. El arsénico y las sustancias químicas utilizadas en la fabricación de caucho, cuero y algunos productos textiles pueden estar relacionados con el riesgo de cáncer de vejiga.
- Tratamientos oncológicos previos: los tratamientos con fármacos anticancerosos o aquellas personas que recibieron tratamientos con radioterapia en la zona de la pelvis tienen un mayor riesgo a desarrollar cáncer de vejiga.
- Inflamación crónica de vejiga: las infecciones o inflamaciones crónicas de las vías urinarias, el uso del catéter urinario por tiempo prolongado, y algunas infecciones continuas por parásitos aumentan igualmente el riesgo de aparición de la enfermedad.
- Antecedentes personales o familiares.
Aunque no hay forma de prevenir el cáncer de vejiga, si se pueden tomar medidas para ayudar a reducir el riesgo, por ejemplo:
- No fumar.
- Tener mucho cuidado con las sustancias químicas, en caso de que esté en contacto directo con ellas.
- Elegir una dieta saludable y bien equilibrada. Los antioxidantes presentes en las frutas y las verduras ayudan a reducir el riesgo de padecer cáncer.
El pronóstico depende del estadio en el que se encuentre el cáncer , el tipo de células del cáncer de vejiga y su aspecto, si hay carcinoma in situ en otras partes de la vejiga y la edad y la salud en general del paciente. Por esta razón es muy importante que si el paciente nota cambio de coloración en la orina u otro de los síntomas antes mencionados debe de acudir a un especialista para ser evaluado.
En Cuba, se trabaja en un equipo multidisciplinario para la detección y tratamiento de este tipo de cáncer. El plan de atención incluye el tratamiento para los efectos secundarios, una parte muy importante de la atención a los pacientes con cáncer.