El Programa Médico para Cánceres del Tracto Digestivo, también conocido como tracto gastrointestinal o GI, es un pasaje tubular que se extiende desde la boca hasta el ano. Su función principal es consumir y digerir alimentos, extraer nutrientes y energía de ellos y luego eliminar los desechos. El tracto incluye el esófago, estómago, intestinos, páncreas, vesícula biliar y el hígado. El cáncer en el tracto gastrointestinal, que es el tipo de cáncer más común, se refiere al desarrollo de tumores cancerosos en cualquier órgano del tracto digestivo.
El colon es la parte más grande del intestino grueso (colon) y junto con el recto y el canal anal forman la última parte del sistema digestivo. Su principal responsabilidad es reabsorber líquidos y otros nutrientes y enviarlos de nuevo al cuerpo mientras envía el resto de los alimentos no digeridos junto con las bacterias y jugos del sistema digestivo al recto, los cuales posteriormente son enviados al canal anal y expulsados del cuerpo.
El cáncer colorrectal es un término que se usa a menudo para los cánceres que comienzan en el colon o el recto debido a que tienen mucho en común.
Hepatectomía: La extirpación de tumores del hígado. Esto se realiza mediante la extirpación solo de la parte en la que se encuentra el tumor, una porción más grande del hígado o un lóbulo completo, dejando atrás una porción suficiente de tejido hepático para que el hígado continúe con sus funciones y para que se regenere. Esta cirugía depende de si el cáncer se ha diseminado a los ganglios linfáticos cercanos y si el hígado está en buen estado de funcionamiento, así como del tamaño, número y ubicación del cáncer.
El páncreas se encuentra en lo profundo del abdomen y es parte tanto del sistema digestivo como del sistema endocrino. El 90% del páncreas es responsable de la producción de enzimas que ayudan a digerir grasas, colesterol y proteínas, mientras que el 10% restante es responsable de la producción de hormonas, como la insulina y el glucagón, que regulan el metabolismo de la glucosa. El cáncer de páncreas a menudo es difícil de detectar debido a su ubicación profunda dentro del cuerpo y porque produce pocos síntomas hasta que el cáncer está bien desarrollado. Hay dos tipos de cáncer de páncreas: el primero y más común es el cáncer del páncreas exocrino (la parte del páncreas que produce las enzimas); el segundo es el cáncer del páncreas endocrino (la parte del páncreas que produce las hormonas).
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