Tratamiento de la Parálisis Cerebral (PC) en la República de Cuba

Parálisis Cerebral (PC) es un grupo de trastornos neurológicos que afectan el movimiento, el tono muscular y la postura de una persona, causados por un desarrollo cerebral anormal o daño al cerebro durante el nacimiento o poco después. Los síntomas de la PC varían ampliamente entre los individuos e incluyen dificultades con la coordinación, temblores, movimientos involuntarios, dificultad con movimientos precisos y problemas con el habla y la deglución.  

Aunque no existe una cura para la PC, diversos tratamientos pueden ayudar a manejar los síntomas y mejorar la calidad de vida. En Cuba, el tratamiento implica un enfoque integral que combina rehabilitación médica, neurológica y física. Los pacientes reciben atención de un equipo multidisciplinario que incluye fisiatras, neurólogos, psicólogos, nutricionistas, podiatras y terapeutas del habla.  

El proceso de tratamiento comienza con una revisión completa de la historia clínica y un examen físico exhaustivo para identificar las causas tratables de la discapacidad, con el objetivo principal de mejorar el movimiento, las habilidades motoras, el tono muscular, los reflejos y la postura.  

Además, se presta atención a las capacidades cognitivas del paciente, el control del esfínter motor, la presencia de convulsiones y cualquier problema de visión, audición o habla.  

Además, se pueden sugerir opciones quirúrgicas para pacientes que pueden caminar con o sin ayuda, con el fin de mejorar el movimiento y la alineación en las piernas, tobillos, pies y caderas, para aumentar la función motora autónoma y mejorar la marcha y el rango de movimiento. 

ETAPA DE DIAGNÓSTICO: 

Evaluar a un paciente con PC antes de iniciar el tratamiento es crucial para desarrollar un plan de tratamiento personalizado, identificar comorbilidades y complicaciones, y maximizar la independencia y mejorar la calidad de vida. 

• Revisión de la historia clínica
• Revisión de la historia familiar
• Consulta con profesionales médicos, incluidos neurólogos, psicólogos y psiquiatras
• Intervenciones médicas anteriores
• Examen físico
• Evaluación neurológica
• Examen musculoesquelético
• Capacidades funcionales
• Evaluación cognitiva y conductual
• Evaluación sensorial, incluida la visión, audición y habilidades del habla
• Evaluación nutricional y del crecimiento 
• Actividad convulsiva 
• Investigaciones de laboratorio y análisis clínico
• Evaluaciones clínicas en profundidad
• Reunión con la familia o el tutor legal

ETAPA DE TRATAMIENTO: 

Aunque no existe una cura conocida para la PC, varios tratamientos pueden ayudar a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida. En Cuba, el programa tiene una duración típica de entre 28 y 31 días e incluye lo siguiente, entre otras cosas: 

• Terapia con toxina botulínica (Botox): El botox es una forma de tratamiento médico utilizada para reducir la espasticidad muscular y la rigidez mediante la parálisis temporal de los músculos hiperactivos bloqueando las señales nerviosas que provocan las contracciones musculares, lo que permite que los músculos se relajen y se alarguen. 

• Fisioterapia: La fisioterapia intensiva, que consta de 38 sesiones de ejercicios de fortalecimiento, tiene como objetivo mejorar las habilidades motoras, normalizar el control postural, superar las discapacidades persistentes, facilitar patrones de movimiento normales y readaptar el equilibrio y la marcha. Este programa también puede incluir ejercicios de natación para mejorar la función cardiovascular, la fuerza muscular y el tono.

• Terapia ocupacional: El tratamiento de rehabilitación se centra en ayudar a los individuos a realizar actividades de la vida diaria y en su capacidad para llevar a cabo tareas como vestirse, comer y la higiene personal de manera independiente y eficiente. El objetivo principal de esta terapia es desarrollar habilidades motoras finas, mejorar la coordinación mano-ojo y adaptarse a las limitaciones físicas. 

• Terapia del habla: Este tipo de terapia ayuda con las dificultades del habla, el lenguaje y la deglución. Más allá de mejorar las habilidades de comunicación, la terapia del habla también se centra en fortalecer y mejorar el control de los músculos faciales y orales.

• Rehabilitación neurológica: Centrada en mejorar los aspectos cognitivos, emocionales y psicosociales, el objetivo principal es mejorar el procesamiento de la información, la memoria, la atención y concentración, la planificación y priorización, y la percepción visual.

• Presoterapia: Es una técnica terapéutica que utiliza presión de aire controlada para estimular los sistemas linfático y circulatorio. Este tratamiento tiene como objetivo reducir la rigidez muscular, mejorar el flujo sanguíneo, aliviar el dolor y disminuir la hinchazón, mejorando así el confort y la movilidad general.

• Terapia de ozono: La terapia con ozono para pacientes con parálisis cerebral implica la administración de gas ozono para mejorar el suministro de oxígeno a los tejidos, reducir la inflamación y promover la curación. La terapia tiene como objetivo mejorar el metabolismo celular y fortalecer las defensas antioxidantes naturales del cuerpo. Al aumentar los niveles de oxígeno en la sangre, la terapia con ozono puede favorecer una mejor función general y bienestar.

• Terapia con cama magnética: Esta terapia consiste en el uso de una cama con imanes incrustados para crear un campo magnético que mejore la circulación, reduzca la inflamación y alivie el dolor. La terapia tiene como objetivo mejorar la relajación muscular, reducir la espasticidad y promover el bienestar físico general influyendo en los campos magnéticos naturales del cuerpo.

• Estimulación eléctrica funcional (FES): La FES es particularmente beneficiosa para mejorar los patrones de marcha, la función de la mano y la movilidad general. Esta forma de terapia utiliza corrientes eléctricas de bajo nivel para activar músculos específicos y mejorar la función motora y la fuerza, lo que a su vez mejora el control del movimiento, reduce la espasticidad y promueve la reeducación muscular.

• Cirugía ortopédica: Para los pacientes con PC que pueden caminar con o sin ayuda, se puede realizar una cirugía ortopédica para corregir anomalías musculoesqueléticas y mejorar la movilidad, la postura y la función general. Este tipo de cirugía puede implicar el alargamiento o liberación de músculos y tendones tensos, la realineación de huesos y articulaciones, o la estabilización de articulaciones para reducir el dolor y mejorar el movimiento.