Tratamiento de la Enfermedad Degenerativa del Disco (EDD)
La enfermedad degenerativa de disco (DDD) no es tanto una enfermedad, sino una condición progresiva que resulta de cambios normales en los discos espinales, que son las almohadillas en forma de cojín entre las vértebras de la columna. Estos discos actúan como amortiguadores, proporcionando flexibilidad y soporte a la columna vertebral. A medida que uno envejece, los discos pueden perder hidratación, elasticidad y altura, lo que hace que ya no amortigüen ni proporcionen movilidad entre las vértebras.
La DDD es una de las causas más comunes de dolor en la parte baja de la espalda y el cuello, y puede desarrollarse en cualquier nivel de la columna, pero es más común en las regiones cervical y lumbar baja.
Cuba ofrece opciones de tratamiento avanzadas para la DDD, aprovechando su reconocido sistema de salud y experiencia médica. El objetivo del tratamiento es aliviar el dolor y detener más daños, generalmente comenzando con tratamientos conservadores que incluyen programas de fisioterapia personalizados diseñados para fortalecer los músculos espinales, mejorar la flexibilidad y reducir el dolor. Estos programas pueden incluir estiramientos, ejercicios de fortalecimiento e hidroterapia. Para los pacientes que requieren atención más intensiva o que no han respondido a tratamientos conservadores, se recomiendan tratamientos intervencionistas como inyecciones de esteroides y opciones quirúrgicas como la discectomía y la fusión espinal, asegurando un enfoque integral para manejar y aliviar los síntomas de la DDD.
Es importante tener en cuenta que la degeneración del disco no puede revertirse, aunque los síntomas de la DDD a veces pueden mejorar con el tiempo con un manejo adecuado. Sin embargo, puede llevar a otras afecciones de la columna, como:
- Estenosis espinal, el estrechamiento del canal espinal, que puede comprimir la médula espinal y los nervios.
- Osteoartritis en la columna vertebral, el cartílago que amortigua las articulaciones de la columna se desgasta.
- Espondilolistesis, una vértebra se desliza hacia adelante sobre la vértebra inferior debido a la degeneración de las articulaciones facetarias.
- Escoliosis, una curvatura lateral anormal de la columna, que a menudo resulta en una curva en forma de C o S.
- Osteofitos, desarrollo de proyecciones óseas (espolones óseos) a lo largo de los bordes de los huesos en la columna vertebral.
Tipos de enfermedad degenerativa de disco
La enfermedad degenerativa de disco (DDD) puede manifestarse de varias formas, dependiendo de la ubicación y naturaleza de la degeneración del disco.
- Enfermedad degenerativa de disco cervical: Afecta los discos en la región del cuello (columna cervical).
- Enfermedad degenerativa de disco torácica: Afecta los discos en la región de la parte media de la espalda (columna torácica).
- Enfermedad degenerativa de disco lumbar: Afecta los discos en la región inferior de la espalda (columna lumbar).
- Enfermedad degenerativa de disco multinivel: Afecta varios discos en diferentes regiones de la columna.
- Radiculopatía: Ocurre cuando la degeneración del disco lleva a la compresión de las raíces nerviosas.
- Mielopatía: Ocurre cuando la médula espinal misma se comprime.
Causas de la enfermedad degenerativa de disco
- Envejecimiento: La causa principal de la DDD es el proceso natural de envejecimiento. Con el tiempo, los discos pueden deshidratarse y perder su flexibilidad, elasticidad y características de absorción de impactos.
- Desgaste: El estrés repetido y las lesiones menores pueden causar desgarros en el disco externo.
- Genética: Tener antecedentes familiares de DDD puede aumentar el riesgo.
- Lesión: El trauma o la lesión en la columna pueden acelerar la degeneración del disco.
Síntomas de la enfermedad degenerativa de disco
- Dolor crónico.
- Dolor que se irradia a las extremidades.
- Entumecimiento y hormigueo.
- Debilidad muscular.
- Aumento del dolor con las actividades.
- Episodios periódicos de dolor severo.
- Reducción del rango de movimiento.
- Espasmos musculares.
Diagnóstico de la enfermedad degenerativa de disco
La enfermedad degenerativa de disco se diagnostica a través de pruebas para determinar su gravedad y desarrollar un plan de tratamiento efectivo adaptado a las necesidades específicas del paciente. Además de la consulta con un especialista, el examen físico y la revisión de la historia médica, se pueden realizar las siguientes pruebas:
- Imágenes diagnósticas:
- Rayos X: Los rayos X suelen ser la primera prueba de imagen realizada. Pueden mostrar cambios en la estructura ósea de la columna, como el estrechamiento del espacio entre los discos, espolones óseos u otros signos de degeneración.
- Resonancia Magnética (RM): Las exploraciones de RM proporcionan imágenes detalladas de los tejidos blandos, incluidos los discos intervertebrales, la médula espinal y los nervios. La RM es particularmente útil para identificar hernias discales, deshidratación del disco y compresión nerviosa.
- Tomografía Computarizada (TC): Las tomografías computarizadas ofrecen imágenes más detalladas de las estructuras espinales que los rayos X y pueden ser útiles para evaluar la magnitud de los cambios óseos y el estrechamiento del canal espinal.
- Pruebas adicionales:
- Estudios de conducción nerviosa/Electromiografía (NCS/EMG): Estas pruebas miden la actividad eléctrica de los nervios y los músculos para determinar si hay daño o compresión nerviosa causada por la degeneración del disco.
- Gammagrafías óseas: Se puede utilizar una gammagrafía ósea para detectar áreas de mayor actividad ósea, lo que puede indicar inflamación u otras anormalidades.
- Análisis de sangre: Se pueden realizar análisis de sangre para descartar otras afecciones que puedan causar síntomas similares o para verificar problemas subyacentes que podrían estar contribuyendo al dolor del paciente. También se pueden realizar para evaluar la salud general del paciente.
Opciones de tratamiento para la enfermedad degenerativa de disco
El tratamiento de la enfermedad degenerativa de disco tiene como objetivo principal reducir el dolor y prevenir las recaídas tanto como sea posible, generalmente mediante una combinación de métodos de manejo del dolor, ejercicio/fisioterapia y modificaciones en el estilo de vida. Si el tratamiento conservador no proporciona alivio de los síntomas o en casos graves de DDD, se pueden recomendar opciones quirúrgicas.
Opciones no quirúrgicas
Los métodos conservadores incluyen medicamentos para el dolor, relajantes musculares, narcóticos, inyecciones de corticosteroides y fisioterapia.
Fisioterapia:
- Terapia de calor y frío: Aplicar calor puede relajar los músculos y mejorar el flujo sanguíneo, mientras que la terapia con frío puede reducir la inflamación y adormecer los tejidos adoloridos.
- Estimulación eléctrica: Técnicas como la estimulación nerviosa eléctrica transcutánea (TENS) pueden ayudar a reducir el dolor y mejorar la función muscular.
- Terapia de ultrasonido: Utiliza ondas sonoras para generar calor profundo en los tejidos, promoviendo la curación y reduciendo el dolor.
- Movilización y manipulación: Técnicas manuales suaves para mejorar la movilidad de las articulaciones, reducir el dolor y aumentar la flexibilidad.
- Ejercicios de fortalecimiento: Se centran en los músculos del núcleo para apoyar la columna vertebral y reducir el riesgo de nuevas lesiones.
- Ejercicios de flexibilidad y estiramiento: Mejoran la flexibilidad de la columna vertebral y los músculos circundantes, aliviando la presión sobre los discos degenerados y mejorando el rango de movimiento.
- Ejercicios de estabilización: Se centran en mejorar la estabilidad espinal y la postura, como inclinaciones pélvicas, puentes y levantamiento de piernas.
- Ejercicios aeróbicos: Actividades de bajo impacto como caminar, nadar o andar en bicicleta para mejorar la aptitud cardiovascular sin ejercer una presión excesiva sobre la columna vertebral.
- Corrección postural: Educación sobre la postura adecuada para minimizar la tensión en la columna vertebral durante las actividades diarias.
- Educación y manejo personal: Estrategias de enseñanza para manejar el dolor en casa y orientación sobre la modificación de actividades para evitar agravar los síntomas e incorporar el ejercicio regular en las rutinas diarias.
- Ejercicios específicos para tareas: Ejercicios adaptados a las actividades diarias y necesidades ocupacionales del paciente para mejorar la función general y reducir el riesgo de nuevas lesiones.
- Entrenamiento de equilibrio y coordinación: Para mejorar la estabilidad general y reducir el riesgo de caídas o nuevas lesiones.
Opciones quirúrgicas
La cirugía generalmente se considera cuando los tratamientos conservadores no proporcionan alivio o cuando los síntomas se vuelven graves y afectan significativamente la calidad de vida del paciente. Las consideraciones para la cirugía incluyen:
- Dolor persistente.
- Síntomas neurológicos.
- Inestabilidad espinal.
- Pérdida de función.
- Disfunción de la vejiga o el intestino.
- Estado de salud general del paciente.
Las opciones quirúrgicas incluyen:
- Discectomía: Este procedimiento implica la eliminación de la parte dañada de un disco intervertebral que está presionando una raíz nerviosa o la médula espinal.
- Fusión espinal: Este procedimiento implica la unión permanente de dos o más vértebras para estabilizar la columna vertebral y reducir el dolor causado por la degeneración del disco. Durante el procedimiento, se utilizan injertos óseos, junto con varillas o tornillos metálicos, para fusionar las vértebras afectadas, evitando cualquier movimiento entre ellas y, por lo tanto, aliviando el dolor asociado con la inestabilidad espinal.
- Foraminotomía: Este procedimiento consiste en ensanchar el foramen, el pasaje por el cual las raíces nerviosas espinales salen del canal espinal, eliminando hueso o tejido que está obstruyendo el foramen.
- Laminotomía y laminectomía: Estos son procedimientos mínimamente invasivos para eliminar una parte de la lámina, el arco óseo de una vértebra, para crear más espacio dentro del canal espinal y aliviar la presión sobre la médula espinal o los nervios. Este procedimiento mínimamente invasivo crea más espacio dentro del canal espinal.
Alojamiento:
HABITACIÓN PRIVADA CON LAS SIGUIENTES CARACTERÍSTICAS:
- Cama electrónica para pacientes
- Equipo para pacientes discapacitados
- Conexión de oxígeno
- Tres comidas que tienen en cuenta las preferencias del paciente y/o dietas especiales prescritas por el médico
- Baño privado completamente equipado
- Enfermería y cuidados de enfermería
- Televisión en color con canales nacionales e internacionales
- Servicios telefónicos locales e internacionales (aplica costo adicional)
- Caja fuerte
- Servicio de internet en cada piso
- Servicios de lavandería
Servicios adicionales incluidos en el programa:
- Asistencia en la emisión y extensión de visas (si es necesario)
- A cada paciente/acompañante se le asignará un miembro de campo multilingüe encargado de atender todas las necesidades de traducción y personales de nuestros pacientes;
- 20 horas de servicio de internet;
- Recogida y traslado al aeropuerto local;
- Recogida y traslado al hospital (si es necesario).